Cuando hablamos de meditación, de inmediato nos vienen a la mente conceptos como “poner la mente en blanco”, hacer la postura de la flor de loto, repetir mantras,… pero en este curso de 20 días, queremos alejarnos de la imagen dogmática que tiene la meditación.

Ese concepto de que meditar está sólo al alcance de unos pocos eruditos, y que no todos servimos para ello, es algo que en Vitalí Clínica SPA queremos rectificar, ya que hay múltiples maneras de llegar a un estado meditativo con prácticas que poco tienen que ver con el concepto tradicional de meditación.

Introducción al Curso de NO Meditación de Vitalí Clínica SPA.

La meditación es una práctica relajante, que por medio de ciertos ejercicios de respiración, mantras o actividades, ayuda a reducir el estrés y la ansiedad. Además, meditar tiene muchos beneficios para nuestra salud:

  • Ayuda a mejorar la salud emocional y el aumento de la felicidad.
  • Te ayuda a tener una mayor consciencia de uno mismo.
  • Facilita el desarrollo de la inteligencia emocional y la empatía.
  • Mejora la retención de información y la memoria.
  • Como mencionamos antes, ayuda a reducir el estrés y la ansiedad.
  • Ayuda a combatir la depresión.
  • Ayuda a reducir la presión en sangre.

Para que seas capaz de adoptar la meditación a tu día a día, sin necesidad de ponerte a meditar, hemos preparado una série de prácticas meditativas, a llevar a cabo en 20 días, que poco tienen que ver con la meditación tradicional.

Cada día, una práctica diferente que puede ir desde cerrar los ojos, mirar una vela, construir una grulla de papiroflexia o incluso bailar. Y aunque puedan parecer prácticas que poco tienen que ver con la meditación, están todas ellas apoyadas por la neurociencia.

Medita haciendo papiroflexia

Esta es una práctica que lo que pretende es que te centres exclusivamente en el aquí y el ahora, y evitar que tu mente se distraiga con otras cosas. Este tipo de prácticas son las denominadas prácticas Mindfulness, y van mejorando con la repetición.

Es por eso que no te limites a hacer una grulla este primer día del curso de meditación, sino que te invitamos a que hagas una diaria, durante los 20 días que dura el curso.

Medita tomando el té.

Meditar también puede ser algo tan habitual como poner agua a hervir, y prepararte un rico té. En cuanto te lo tomes, cierra los ojos y empieza a intentar percibir los matices y sabores, además de seguir el recorrido que la infusión hace desde el primer sorbo, hasta que tragas y su viaje por dentro de tu cuerpo hasta tu estómago, y nota el calor que ésta te proporciona.

Medita cerrando los ojos.

Hoy siendo el 3er día que realizas la grulla, seguro que ya no te es tan difícil y apenas te distraes construyendola ¿verdad?

En esta práctica de meditación, queremos que cierres los ojos, y pongas atención a otro de tus sentidos, el oído. Pon una música relajante o simplemente escuchar los sonidos de tu entorno. Y mientras haces esto durante 5 minutos, queremos que pongas tu atención en un sólo sonido. Puede ser las cuerdas de una guitarra, o el canto de un pájaro.

Apapáchate y Medita.

Los apapachos son una de las prácticas placenteras que no dudamos en llevar a cabo con aquellos que queremos, pero siempre nos olvidamos de aquella persona a quién debemos querer más que nadie: a nosotros mismos.

Es por eso que en ésta práctica, queremos que te apapáches a ti mismo, con un sencillo auto-masaje, que te ayudará a relajarte y aliviar el estrés.

Medita bailando.

El ejercicio de hoy, es una de las prácticas meditativas más alternativas (por así decirlo) ya que se trata de bailar. Baila en tu casa sin vergüenza, sin miedo a que nadie te juzgue, y baila como quieras. De este modo ayudarás a liberar tensiones de tu cuerpo y reducir la ansiedad.

Medita con el fuego de una vela.

Antes de ir a dormir queremos que relajes tus ojos, y lo hagas mirando la llama de una vela durante 5 minutos. Este ejercicio llevará tu mente a un estado de relajación óptimo para tener un sueño profundo y reparador.

Meditación con agua.

Después de utilizar el fuego, vamos a realizar una práctica meditativa con su antagonista, el agua. Te recomendamos que prepares una tina (o si no tienes de una, usa una charola para remojar los piés) y con agua caliente, añádele hierbas medicinales y sales de baño. Cierra los ojos, y dedícate esos 5 minutos a relajarte y olvidarte de tus obligaciones.

Medita cantando.

Cantar o tararear es un ejercicio meditativo que puede ayudar a tu mente a llegar a un estado de relajación óptimo para la meditación. No es sorprendente que el uso de la voz sea tan útil, ya que por eso es que se emplean mantras cuando se medita.

Meditación con equilibrio.

¿Sabías que la práctica del Yoga, no es más que otra manera de meditación? El uso de nuestro cuerpo de manera consciente, junto con los ejercicios de respiración, pueden llevar a nuestra mente al estado meditativo deseado. Por eso hoy te invitamos a que realices la postura del árbol durante 5 minutos. No importa si no lo consigues a la primera, lo importante es estar en el momento presente y poner en práctica el balance entre el cuerpo y la mente.

Medita como un héroe.

¿Cómo van esas grullas? Después de 10 días, seguro que ya te salen mucho mejor, y te es más fácil centrarte en su creación, ¿verdad? Hoy te aconsejamos que te sientas como un héroe, y que durante 5 minutos adoptes la postura de wonderwoman, y verás como notarás los efectos positivos en tu mente, de éste sencillo ejercicio.

Pregúntate ¿Para Qué?

En esta práctica meditativa, queremos que utilices tu cerebro para meditar y aclarar tu mente. Para ello, te invitamos a que te hagas la pregunta ¿Para qué?. Esta pregunta no sólo aclarará tu mente, sino que además te ayudará a generar pensamientos ilimitados.

Medita empleando la visualización.

Esta vez, te invitamos a que medites, tomando 5 minutos de tu tiempo, y lo dediques a visualizar situaciones y acciones. De este modo, tu cerebro se familiariza con situaciones que todavía no han acontecido. También, es otro ejercicio para ayudarte a emplear tu cerebro como tu principal instrumento meditativo.

Meditando enfrentando tus miedos y deseos.

En este ejercicio, queremos que hagas un poco de reflexión interior, y te reconozcas a ti mismo y las motivaciones personales que te motivan en la vida.

Para ello te invitamos a que hagas una lista sobre todo aquello que haces por miedo, y todo aquello que haces por deseo.

Aprende a detectar patrones.

De nuevo, te invitamos a reflexionar sobre ti mismo, y para ello, de nuevo, queremos que hagas una lista sobre todo aquello que has terminado en tu vida (como la universidad, por ejemplo), y todo aquello que has dejado incompleto (una competición por ejemplo).

Y dedicale un tiempo a ver cuales son los motivos o patrones por los que no terminaste.

Medita aplicando el autocontrol.

La disciplina y el autocontrol también so unos buenos métodos para llevar tu mente a ese estado meditativo en el que te sientes relajado y compensado gracias a la segregación de endorfinas.

Para ello, realiza una sencilla tarea, como la de dar un mordisco a tu snack favorito, pero sin terminarlo. Déjalo durante 10 minutos, y regresa a terminarlo pasado ese tiempo. ¡Te garantizamos que ese sentido de autorecompensa te va a hacer sentir genial!

Tiempo vrs. Ciclos.

Sobretodo en nuestra sociedad actual, tenemos demasiado presente el tiempo, el tiempo para estudiar, el tiempo para comprar una casa, el tiempo de crear una familia,… pero en realidad, la vida se compone de ciclos, y estos no tienen nada que ver con el tiempo, pues un ciclo puede llevar el tiempo que sea necesario para que se complete. Así que aprende a detectar los ciclos en los que se compone tu vida.

Meditación en el agua.

Aprende a usar el agua como elemento reparador de tu cuerpo y de tu mente, así que mientras te bañas o te duchas, céntrate en sentir las diferentes temperaturas reparadoras que ayuden a sanar tu cuerpo y tu mente.

Medita escribiendo al pasado y al futuro.

Aquí queremos que hagas un trabajo para conocerte a ti mismo y hagas 2 cartas. La primera, dirigida al niño que un día fuiste, como te va en la vida, si cumpliste los sueños que tenía él de pequeño,… y a el anciano que un día serás.

Anclaje emocional.

En el último día del curso de no meditación, queremos que emplees tu cerebro, y detectes y aprendas a utilizar tus propios recursos emocionales para hacer frente al dolor, y aprender a aceptar y construir utilizando la creatividad.

Queremos que conectes tu pasión con tu creatividad utilizando un recuerdo poderoso para acceder a la energía poderosa y creativa de aquel momento.

Esperamos que además de dominar la construcción de grullas de Origami después de construir una diária, además ya no te suene extraño el concepto de meditación, y tengas tu mente más preparada y abierta para proseguir con el curso, y adoptar poco a poco, otros métodos más avanzados, para sanar tu cuerpo y mente, y conocerte mucho mejor.

Contáctanos.